jueves, 22 de agosto de 2013

Día 22 de Agosto. Kampong Thom. Templos, Santuarios y más murciélagos

A las 8 de la mañana cojo la mini van (es un par de dólares más caro que el autobús pero bastante más rápido) que me lleva a Kampong Thom. Esta ciudad y sus templos pre-angkorianos no estaban en mi itinerario inicial, entre otras cosas porque se situaba al norte del Tonle Sap y mi recorrido transcurría por el sur del lago, pero como tengo tiempo aprovecho para conocer una nueva ciudad que tiene cosas muy interesantes por descubrir. El trayecto dura tan sólo 2 horas y es que pese a lo bacheado de la Carretera Nacional 6 el conductor es un verdadero kamikaze. Ha adelantado a todos y nadie nos ha adelantado a nosotros.

Una de las furgonetas más rápidas del mundo y eso que llevaba 16 personas.
La ciudad,  capital de la provincia del mismo nombre y 68.000 habitantes, se encuentra a 147 kilómetros de Siem Reap, a mitad camino de la carretera que la une con la capital Phnom Penh. Ultimamente parece que la empiezan lentamente a desarrollarla  turísticamente gracias a que es la base para visitar Sambor Prei Kuk y Phnom Santuk, aunque la ciudad en sí no tiene nada más que ofrecer aparte de sus impresionantes murciélagos que luego comentaré.

El Mercado central de la ciudad.
Nada más llegar y registrarme en un hotel que cuenta con el único ascensor de la ciudad, he ido a contratar un tuk tuk para que me lleve a las dos visitas que tenía en mente. Tras un rato negociando lo he sacado por 17 dólares (13 euros) desde las 10,30 de la mañana hasta aproximadamente las 5 de la tarde. En el hotel me habían dicho que el precio normal para ambos viajes era 25 USD que es lo primero que me ha pedido el conductor.

Muy cerca del mercado. El edificio más alto es mi hotel, uno de los más conocidos entre los pocos que hay en la ciudad
Sambor Prei Kuk, un conjunto de más de 100 templos perdidos en la jungla esta a unos 30 Km al Norte de la ciudad y tardamos una hora en llegar, bien es cierto que el tuk tuk parecía bastante lento pero al fin y al cabo tardó lo que en mi guía indicaba.  El tuk tuk parecía tener un problema de refrigeración que es curiosamente por agua, pero no parece un radiador, en todo caso durante el día ha tenido que parar tres  veces a reponer el agua del depósito, una vez en un pozo y las dos siguientes directamente de las lagunas que se forman junto a los campos de arroz.

El conductor del tuk tuk sacando agua de un pozo para que no se recaliente el motor
observar el depósito de agua, que no duraba más de 40 minutos con el vehículo en marcha
Cuando el agua la tienes junto a la carretera es lo más fácil, no hace falta que esté limpia de impurezas, si hay una rana tampoco debe pasar nada.
Francamente debo decir que el día ha resultado extraordinario, sobre todo por la mañana. Los templos son, como todos, interesantes, pero el camino hasta llegar a ellos ha sido sencillamente precioso e interesante, con sus aldeas, pueblos, campos de arroz y los animales que había por todo el trayecto. Siempre elijo el tuk tuk para este tipo de trayectos, porque aunque ir de paquete en moto, además de menos seguro, es más rápido y más barato para una sola persona, no te permite tomar fotos por el camino ni observar los detalles.

Clásica casa de campo camboyana sobre pilotes.
El camino de tierra estaba bastante bien para la circulación, excepto cuando pasaba un coche o camión y levantaba polvo, pero para eso llevaba mi super mascarilla.
El niño tenía ciertos problemas para sacar a las vacas del camino
Las palmeras estas producen azúcar, no se que especie son
La verdad es que me esta resultando difícil seleccionar las fotos entre todas las que he tomado tanto a la ida como a la vuelta. También he hecho algunos mini vídeos, os pongo uno para que veáis el efecto de verlo desde el tuk tuk.

 

La entrada al conjunto de templos cuesta 3 USD. Como casi todo en Camboya, aparte de Angkor, lo visita poquísima gente y tan sólo he visto a una decena de personas por allí. Lo primero que hacen cuando llegas al parking es ofrecerte un guía oficial. Bajo mi punto de vista es más divertido y simpático dejar que un niño o una niña te guíen por allí, eso si, por tu cuenta no vayas que te pierdes casi seguro. Aquí tenéis a mi guía a la que he tenido que comprar un pañuelo típico camboyano por un dólar más otro que le he dado de propina.

Mi Super Guía en los templos
También me ha hecho una foto
Y luego nos la hemos hecho juntos.
Del total se visitan tres de los complejos de templos y sus tres o cuatro santuarios satélites que tiene cada uno y en algunos casos alguna puerta que queda del recinto exterior e incluso grandes embalses. Sobre las puertas llama la atención esta que apenas se ve entre las raíces que la cubren. Del muro queda muy poco y esta en muy mal estado

Esta es una de las puertas del recinto absolutamente tomada por las raices
Esto es lo que queda del muro, que está totalmente cubierto de vegetación.
Un embalse de tamaño más que considerable
Son pre-angkorianos, se empezaron a construir en el siglo VII y están hechos con ladrillos en lugar de las grandes piedras que se utilizaron en las épocas posteriores.

Los templos tenían luz natural y aquí se observa muy bien los ladrillos con los que se construían
Además de los escasos recursos con los que cuentan y que creo que hasta el 2008 no se limpió de minas y por tanto no podía visitarse, hay que tener en cuenta que la zona fue víctima de los bombardeos americanos e incluso se pueden ver varios crates ocasionados por las explosiones.

No se ve muy bien, pero es el cráter originado por la explosión de una bomba, como hay muchos.
Aunque se saquearon, sobre todo por los vietnamitas,  muchas de las imágenes que existían en los templos y santuarios, algunos se pudieron recuperar. Unos están en el Museo Nacional y un par de ellas puedes verlas aquí.

Esta imagen ha sido reconstruida tras ir apareciendo a piezas sueltas.
Casi todos los templos y santuarios están bastante destrozados pero  cuentan con relieves en algunos casos están bastante bien conservados.


Uno de los santuarios satélites a los templos.

En este, pese a la vegetación, se ven muy bien los grabados.
Este estaba en pleno proceso de reconstrucción
Los muros se rompen pero al menos los relieves están intactos.
Este está hecho polvo
En un templo y alguno de los santuarios se están realizando trabajos de restauración, el más importante se veía dirigido por un occidental, seguramente debe ser algún proyecto de cooperación exterior,

Aquí de momento le han puesto unos refuerzos para que no caiga la puerta
Este parecía el jefe de los restauradores, había 7 u 8 personas trabajando.
Es el primer templo que te encuentras y donde se concentran los trabajos de restauración
Otra vista del mismo templo
La vuelta, tan sorprendente como la ida. Todos los niños saludando, algunos bañándose en las lagunas y mucha gente trabajando en los campos

Búfalo de agua, siempre están refrescándose.

Para la segunda visita había que volver a la ciudad y dirigirse entonces hacia el Oeste hasta la población de Kakoh, famosa en el país por la construcción de imágenes religiosas de todos los tamaños. Hay decenas de talleres en la carretera y en ellos puedes ver casi el proceso que es fundamentalmente de martillo y escoplo, si parece que utilizan amoladores para el acabado final, pero el paso a través de esa zona de la carretera suena como si estuvieras en la cantera de Obelix por los golpes de martillo.

Estatua recién comenzada de esculpir
Este tenía un tamaño considerble
Llegar a Phnom Santuk nos lleva otra media hora para cada trayecto.Nada más pasar Kakaoh, a la izquierda está la entrada al Santuario y Monasterio. La entrada cuesta 2 USD.

Cartel del desvió para entrar en Santuk
La montaña de Santuk con 207 metros es la más alta de la zona, con un desnivel de 180 metros sobre la entrada y también la más sagrada y cuenta además con el más importante templo en funcionamiento de la región. No es antiguo pero la montaña que no ha sufrido el efecto de la deforestación es una isla de jungla entre tanto arrozal.

Ahí comienzan las escaleras y la exhuberante vegetación.
Visa desde mitad del recorrido.
Lo más destacable son los 810 escalones de diversos tamaños que debes subir si quieres ver los templos y stupas  que hay en lo alto. Te pueden subir en moto por un camino, pero no tiene gracia. Te perderías las vistas y a los monos que en unas pocas docenas habitan la montaña.

Cada tramo de estos venía seguido de otro parecido, parecía no acabar nunca

Es curioso que te indican cada 10 escalones, cuantos llevas y cuants te falta. Los primeros 700 están bordeados por unos 3.000 pequeños Budas  unidos, según mis cálculos. Las pendientes se van haciendo más pronunciadas cada curva que das. A esa altura de la subida hay un pequeño santuario donde se observan las menos vistas.

Obsérvese la numeración, no se si para daar ánimos o para quitarlos. Pero al final no es tan duro como parece.
Aquí se ven bien los pequeños Budas unidos durante todo el recorrido. Según el tamaño del escalón hay entre 1 y 4 Budas.
Vista desde el santuario allá por el escalón 700
Hay que esperar hasta el escalón 750 para ver a los monos y es que se ve que deben estar un poco más fresquito a arriba.

Típica imagen de los monos quitándose las pulgas o no se que.
Este comía algo que tampoco se lo que es, pero si te acercabas mucho te sacaban los dientes y te chillaban.
Feliz familia
En este vídeo se puede ver a los pequeños haciendo de las suyas.


Arriba finalmente puedes ver los templos, algún monje y me ha llamado la atención una figura que parece ser un Buda a caballo, que hasta ahora no lo había visto nunca.

Monasterio, templo y santuarios a lo alto de la montaña
Una de las stupas
Un Buda a caballo
Entrada de uno de los templos.
Tras la vuelta al hotel y una ducha que me quite el color tierra de todo mi cuerpo tras tragarme todo el polvo que levantaban los otros vehículos en las carreteras de tierra e incluso en la Nacional 6, me he ido directamente en un paso de no más de 10 minutos hasta la más original de las visitas que tiene la ciudad. Los murciélagos de unos 40 centímetros de envergadura, según he leído hoy. 


Aún de día, los animalitos duermen plácidamente colgados de las ramas.
Están tan sólo sobre tres enormes árboles, que he también he leído que son caobas, pero que no lo tengo claro, y hay centenares de ellos colgados sobre sus ramas todos los días hasta el anochecer. Es cierto que también los había en Sien Reap y me había impresionado, pero estos árboles no son tan altos y están más aislados y puedes ver mucho mas de cerca a estos mamíferos de tan atemorizante leyenda. Yo para ser franco el único temor que tenía cuando estaba justo abajo de cientos de ellos es que cuando despertaran pudieran hacer sus necesidades sobre mi, pero al parecer se van a otro sitio a hacerlo, porque no se ve en el suelo más que hojas.

Hay cientos, pero como están tan altos y empieza a oscurecer ya no se ven tan bien.
Alguno empieza a desplegar sus alas.
Poco a poco van despertando y como chillan tanto imagino que despertando a los otros.

Y es que había una barbaridad de animalitos.
Cuando empiezan a volar ya resulta muy difícil tomar fotos y es mejor hacerlo con vídeo, aunque hay que decir que primero están quietos, alguno "madruga" y se le oye, cuando oscurece un poco más alguno empieza a desplegar las alas, pero luego, sin darte cuenta empiezan todos de golpe a volar.



Debo reconocer que estos animales me gustan especialmente, a lo mejor porque de pequeño los cazábamos, aunque eran muy pequeñitos, o quizás porque el uno de los símbolos de Valencia, quien sabe, lo cierto es que siempre me han gustado y me han interesado mucho.



Ahora saliendo todos a volar y a buscar comida, imagino que a la jungla.



Tengo más así que el quiera que me los pida. Os pongo un último video. Lo cierto es que me estoy haciendo un lío con tanto vídeo que he tomado, así que como cuesta mucho tiempo cargarlo, si mañana veo que hay otro mejor lo cambiaré.



Mañana será un día tranquilo. A las 10 tengo la vuelta para Siem Reap y también tengo el billete de autobús para la frontera con Thailandia y así poder coger el tren para Bangkok el día 24.

1 comentario:

  1. TU HERMANO RAFA DESDE SU MÓVIL23 de agosto de 2013, 5:14

    Hola hermanito. Hoy creo que has tenido un día algo más tranquilo, o al menos has podido ir más a tu aire. Me gusta lo del tuk tuk, sobre todo por lo próximo wue te mantiene de todo lo qje recorres y por el precio. Los templos preangkorianos, me gustan cada vez más. Encuentro un gran misticismo que no se explicar en la aparente simbiosis de la piedra trabajada por el hombre y la vegetación, la Naturaleza. Es como si la selva no hablase y nos sugiriese no remover lo que intenta tspsr, ocultar, engullir. Muy intrresante. Bien ya sabes, digo con interés tu aventura. Mucho curre previo. .....sigue asi, un beso.

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